Tratamiento para el Trastorno del Pánico




Los tratamientos efectivos para el trastorno de pánico deben incluir medicamentos específicos, formas particulares de psicoterapia y una adecuada educación acerca del trastorno.

La combinación de estos tres tratamiento produce los mejores resultados, aliviando a la gran mayoría de las personas afectadas. En una primera etapa es esencial un adecuado uso de fármacos para corregir la desregulación biológica característica de este trastorno. Desde el punto de vista psicoterapéutico, el objetivo de tratamiento es superar los temores creados a partir de los ataques de pánico y, fortalecer las vulnerabilidades psicológicas que puedan haber contribuido al desarrollo del trastorno. La mejoría inicial generalmente se consigue en un período de tiempo breve, aproximadamente de seis a ocho semanas.

Sin embargo, es necesario que se mantenga el tratamiento con medicamentos por lo menos 1 año, a fin de evitar recaídas y lograr una erradicación total de los síntomas. Si el trastorno de pánico no es tratado adecuadamente puede agregarse, de modo que se torna cada vez más inválidamente para la persona afectada.

Puede haber períodos de mejoría espontánea, pero este trastorno no se cura si no se reciben los tratamientos indicados. Un tratamiento completo e integral, que incluye adecuadas medidas de auto cuidado, contribuye al alivio de las molestias y mejora el pronóstico a largo plazo. La constancia en el cumplimiento de todas las metas es esencial para un buen resultado final.

La suspensión prematura del tratamiento, con presencia de síntomas residuales, es una de las principales causas de recaídas posteriores. Por tanto, cumplir las indicaciones es fundamental para una recuperación completa.